Picasso "Mujer frente al Espejo"
La hipnosis suele emplearse como complemento a la
medicina tradicional para el tratamiento de diversas enfermedades.
Uno de los usos más difundidos de
la hipnosis es en el tratamiento de
las llamadas enfermedades psicosomáticas cuya aparición parecen favorecer
factores como el estrés. Entre ellas: el asma, las eczemas, y el síndrome del
intestino irritable.
ECZEMA: La eczema es una inflamación de la piel que generalmente
causan picazón y escamaciones. La
hipnosis y la relajación pueden ayudar a quien la padece a dejar de rascarse y
aliviar su ansiedad. La hipnoterapia puede ser una excelente aliada cuando se
padece dermatitis atópica infantil. Bajo hipnosis es posible enunciar
sugestiones directas al paciente para reducir síntomas: el picor, la ansiedad y
el insomnio. Por ejemplo se le puede sugestionar para que deje de rascarse en
cuanto se toque la piel con las uñas, incluso si está dormido. El alivio del
picor es una parte esencial del tratamiento de la eccema.
ASMA: La hipnosis es un
tratamiento preventivo, inadecuado para tratar un ataque grave. La hipnosis
ayuda a relajarse y a trabajar en las ansiedades subyacentes que influyen en el
problema, lo que reduce la incidencia y la severidad de los episodios
asmáticos, y la autohipnosis alivia el asma al inicio de un ataque.
SINDROME DEL INTESTINO
IRRITABLE: La relajación lograda con
hipnosis ayuda a paliar los síntomas de este síndrome. Se puede por ej.:
instruir a la persona a usar la visualización
para controlar los músculos abdominales.
TENSIÓN ARTERIAL ALTA: en situaciones estresantes el ritmo cardíaco
aumenta y con él la tensión arterial. Es
frecuente el uso de la hipnosis para tratar la hipertensión. Además de relajar al paciente hipnotizándolo,
el psicoterapeuta lo ayuda a visualizar los procesos psicosomáticos
involucrados para intentar modificar la reacción física. Como por ejemplo imaginar que sus arterias se relajan y
ganan elasticidad permitiendo que la sangre circule por ellas sin presión.
DOLOR: Muchas son las técnicas y estrategias a aplicar mediante la
hipnosis, desplazamiento, desdoblamiento, sustitución, disminución directa,
anestesia de guante, transferencia, transformación, metáforas
neurofisiológicas, distorsión temporal, etc.
DOLOR DE CABEZA Y MIGRAÑA:
Como parte de la inducción el psicoterapeuta usa la relajación muscular
progresiva. Durante la hipnosis se dan sugestiones directas para que la persona
pueda estar más tranquila y además aplique la autohipnosis siempre que se
sienta tensa, aliviando de esta forma dolores de cabeza y migraña. La migraña
puede tratarse produciendo a través de sugestiones hipnóticas un aumento de la
temperatura de manos y brazos.
DOLOR DE ESPALDA: Es posible utilizar la hipnoterapia para trabajar
ciertos músculos emitiendo sugestiones relajantes y lograr controlar el estrés
que provoca el dolor. En el dolor crónico de espalda puede recurrirse a métodos
como la hipnoanestesia.
CÁNCER: La hipnosis para ayuda a las personas con cáncer a
atravesar las distintas fases de la enfermedad. Sus empleos son múltiples: la
hipnosis calma es estrés, reduce los efectos secundarios del tratamiento y
puede realzar la sensación de bienestar ayudando al paciente a sentirse con
mayor control, ya que es algo que puede hacer por sí mismo. También puede
reducir la ansiedad que provoca conocer el diagnóstico a través de la técnica de desensibilización y
potenciando su capacidad de hacer frente a la adversidad.
PARTO EN TRANCE: Durante sesiones de hipnosis previas al parto, el
psicoterapeuta podrá vincular las contracciones con un trance profundo, así la
paciente entrará en trance hipnótico cuando empiece a tener contracciones y el
grado de profundidad irá en aumento a medida que éstas sean más seguidas. La
hipnosis puede aplicarse para relajar los músculos durante la primera fase del
parto, ya que la tensión muscular exacerbaría el dolor.
LA HIPNOSIS EN LA CIRUGÍA: APLICACIONES ADICIONALES: Una de las
claves para lograr una analgesia eficaz es realizar suficientes sesiones de
entrenamiento donde se enseña al paciente técnicas para suprimir el dolor, como
la anestesia de guante. Primero la
persona aprende a controlar el dolor de zonas pequeñas del cuerpo y luego pasa
a zonas más amplias. Asimismo, mitiga la ansiedad y el miedo a la intervención.
Se logran recuperación y cicatrización más rápidas y sangrados menos profusos.
MEJORA DEL SISTEMA INMUNITARIO: El
empleo de la técnica de Visualización
a través de hipnosis, ayuda a enviar un
mensaje desde la corteza cerebral a los sistemas hormonal y nervioso autónomo
que pueden influir en el sistema inmunitario con el objetivo de potenciarlo.
ODONTOLOGÍA: El punto de partida de la terapia aplicando
hipnosis radica en reducir el miedo y la
tensión, relajando al paciente y rompiendo el ciclo miedo-tensión-dolor-miedo.
Siendo posible también para que el paciente se relaje tan pronto se sienta en
la silla del dentista, sugestiones posthipnóticas.